Estimados Padres Conscriptos:
Como servidor y representante de los Dioses ante el Pueblo Romano y su Augusto Senado, es mi personal opinión que combatir a los sirios es la mejor opción, por las pingües ganancias que ello nos reportaría tras la segura victoria.
Además, es hora de combatir a los bárbaros más orientales, para hacerles ver que jamás, repito, jamás, las orillas del Mare Nostrum volverán a conocer sus rapiñas, ni las ciudades del litoral, su yugo, como en su día pasó con los antiguos griegos y los persas.
No obstante, no me cabe duda de que nuestros consulares sabrán elegir la mejor de entre las alternativas.
Vale atque vale.