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« en: 10 de Diciembre de 2010, 04:17:41 pm »
La disputa se ha producido cuando el Imperio ruso, sin previo aviso, ha intentado adquirir influencias en Korea, lugar en el que nuestro Gobierno legítimamente establecía un grado de "protección" acorde a nuestros intereses desde hace varios siglos.
Pese a dicho atropello, nuestro amado Emperador, en pos de una próspera amistad con la Gran Rusia, ha ofrecido un acuerdo en las mismas condiciones que se nos ofreció por parte de Alemania en Formosa:
"PRIMERA PROPUESTA
1- Rusia reduce el marcador de influencia a interés en Korea. Japón se compromete mediante un Tratado a permitir un condominio japones en la zona en 1888.
2- Rusia permite un condominio ruso en Manchuria a partir de 1888.
SEGUNDA PROPUESTA
1- Rusia reduce el marcador de influencia a interés en Korea. Japón indemnizará a Japón con 5L pagaderas en 1888."
La respuesta de Rusia ha sido negativa, siendo lo peor el insulto que nos ha lanzado con su contraoferta:
"1. Rusia reduce el marcador de influencia a interés en Korea.
2. Japón se compromote a permitir un condominio ruso-japonés en la zona desde 1888.
3. Japón indemnizará a Rusia con 16L en 1888 (5L de la reducción del marcador y 11L de reparaciones de guerra)"
Sí señores, sí... Indemnización de guerra nos reclama el Zar... Son evidentes sus intenciones. Pues aún así no rompimos relaciones diplomáticas e, instados por nuestro magnánimo Emperador, pusimos sobre la mesa una nueva oferta de condominios en Manchuria y Corea entre nuestros paises que también fue rechazada.
En resumen: No podemos hacer más sin que nuestro Honor se vea dañado... Solicito a Vuecencias (sobre todo a aquellas que tienen acuerdos con Rusia) que en aras de la Paz en el Planeta hagan entrar en razón al enviado de nuestro, pese a todo, querido Zar.
He dicho
Milu-Kito