- ¡¡¡Y bailaaaareeeee sobre tu tuuuuuumbaaaaa!!! ... ¡¡¡Yeah, yeah, duda, dudududa!!!
- Ejem. Estooooooo. ¿Señor?
- Dime, dime, Dorgar. No te quedes ahí parado como un imbécil.
- Veréis. Los sacerdotes no están muy de acuerdo con vuestra reciente política religiosa.
- ¿Qué quieres decir?
- Bueno, eso de bailar y cantar sobre las cenizas del templo al Gran Dios Sardina........ Creen que quizás no le siente bien a la divinidad.
- ¡Que le den por el c(piiiii) a la divinidad!
- Ejem, ejem. Claro, claro. Ejem. Pero es que parece ser que ha habido indicios y manifestaciones de que la divinidad está molesta con sus hijos. Ciertos acontecimientos, según los sacerdotes. Consideran que deberíamos retomar el incondicional culto al Gran Dios Sardina por el bien de la raza atlante.
- Mmmmmm. ¿Eso creen?
- Si, amo de las profundidades.
- Por la raza atlante lo hago. ¡Qué reconstruyan el templo al Gran Dios Sardina! Estos dioses a la larga siempre se salen con la suya................