Estimados Padres Conscriptos:
Dejadme, en primer lugar, desear la mejor de las fortunas a los nuevos Cónsules de la República. Que los Dioses concedan la misma dicha en su mandato que en la anterior legislatura tuvieron bien a darnos.
Manifiesto con esta intervención a la Cámara que los Alcius consideramos que el cargo de Dictador ha de ser de buen uso, y no un abuso, por lo que no estimamos necesario la necesidad de dicho cargo, y no realizarán acción alguna al respecto.
Vale atque vale.