Se acerca el fin del milenio, y quizá el del mundo. La guerra sigue sacudiendo todos los rincones del mundo, y reyes y plebeyos apenas pueden hacer mas que prepararse para lo que vendrá.
El 20 de octubre de 1095, la tierra se vio sacudida por una tremenda explosion, que aterro a hombres y animales en cientos de kilómetros a la redonda. El Erciya, el mas grande de los volcanes de Cappadocia, en tierras del prospero imperio de Bizancio, entro en erupcion con gran violencia, mientras las gentes de la región, trataban de huir despavoridas de la inevitable destrucción que se avecinaba. Esto no es sino el principio de las grandes catastrofes con las que los dioses parecen castigar a los hombres. Tormentas en Bo Hai, Riow Sea, y el Sea of Libia, preceden una segunda erupcion volcanica, en algún lejano y desconocido lugar del atlantico norte, cuyo estruendo llega hasta escocia como preludio de los negros años que se avecinan.
La tensión en el mediterraneo crece con los rumores que hablan de guerra entre el imperio bizantino, y el califato fatimí. Ni tan solo los embajadores enviados por una y otra nacion para buscar una solucion pacifica a la crisis, logran rebajar la tensión entre ambos reinos.
La rica y poderosa Bagdag, junto al ancestral imperio persa, envian guerreros y suministros al Turkistan, donde el Sultan forzado a convivir con Acima, se prepara para vengar la derrota de Ghuzz.
Las terribles hordas de Gaochan y Kerait abandonan indonesia dirigiendose hacia las ricas tierras que se encuentran hacia el oeste, mientras sus homólogos de Saraba viajan en dirección contraria.
Los guerreros tibetanos se lanzan sobre las regiones mas pobres al noreste del reino, en un afan destructor que no puede reportar mas beneficio que las vidas de los infortunados habitantes de las regiones.
Los hermanos siguen en guerra cuando Chola lanza un desesperado ataque contre los invasores de Manjula, mientras en el norte Rajput y Uttar Pradesh se lanzan sobre la ahora desprotegida Pawar, y los guerreros de Srivijaya se lanzan sobre la región de Mon.
Las costas de China y Butan son atemorizados por los triangulos negros de Humata.
Una luz de esperanza surge en Francia bajo el nombre de la Orden de los Pios caballeros de San Andres, pero junto a la nobleza de estas guardianes se suceden las batallas entre el usurpador del reino de Borgoña, y los ejércitos del imperio germano. Y la marea roja que asola las costas del sur francés parecen anunciar el derramamiento de sangre que se producira en Vermon.
Incluso en el norte se suceden guerras y acuerdos, donde Inglaterra bien entrega territorios a los irlandeses bien siembra la muerte y la destrucción por las tierras escocesas.
Pero entre tantas guerras y masacres algunos como el príncipe Pyotr muestran la prudencia para cuidar de su reino, y llevar buenas palabras en busca de la unidad.
Nuevas ciudades surgen en Japon para mayor gloria de Shirakawa, mientras al otro lado del mar, los señores de Koryo se dedican a ampliar su reino, y Liao trata de recuperar su perdido esplendor.
Los esfuerzos Cordobeses se centran en resolver la crisis abierta con la infortunada ascensión del Hajib.
Venecia y el SRI comienzan una esperanzadora y pacifica convivencia.
En algunos paises como Dai Viet y Aragon numerosos estudiosos comienzan a imponer nuevas doctrinas y formas de entender la ciencia, pero en ningún sitio como en Nasik donde un erudito conocido como Akshay el Viajero, presenta al rey un nuevo invento que habra cambia completamente la concepción de la estrategia militar del reino.
